Las estrategias de manipulación en la comunicación son tácticas diseñadas para tratar de influir en nuestras percepciones, pensamientos o comportamientos de las personas de manera encubierta y a menudo con fines egoístas o engañosos. A diferencia de la persuasión, donde el objetivo es influir de manera abierta y generalmente respetuosa, la manipulación tiende a ocultar las verdaderas intenciones y busca controlar a los demás a través del engaño, la coerción o la distorsión de la realidad.
Aquí te detallo algunas de las estrategias más comunes de manipulación en la comunicación:
1. Gaslighting (Luz de Gas): Hacer que la otra persona cuestione su propia realidad, memoria o percepción. El manipulador busca hacer que la víctima dude de sí misma para ganar control sobre ella.Cuando alguien niega repetidamente haber dicho algo o haber hecho algo, a pesar de que la otra persona sabe que ocurrió, haciéndola dudar de sus recuerdos.
2. Victimización: El manipulador se hace pasar por víctima para generar que empaticemos con el o para evitar asumir sus responsabilidades. Esta estrategia busca que los demás sientan lástima y se sientan obligados a ayudar o a ceder.
3. Culpabilización (Culpar al otro): El manipulador culpa a la otra persona por los problemas o situaciones negativas, haciéndola sentir responsable de algo que no es su culpa, de esta manera el deja de asumir la responsabilidad de sus acciones y coloca a la otra persona como el causante del problema. Una discusión frecuente es por ejemplo en una discusión de pareja desviar la atención de lo que él o ella ha hecho y culpar al otro de sus reacciones o emociones desproporcionadas.
4. Sobrecarga de información (Táctica de confusión): Bombardear con demasiada información, a menudo irrelevante o confusa, para dificultar que la persona se concentre en lo importante y tome decisiones claras.
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5. Distorsión de la verdad: El manipulador modifica o omite ciertos hechos para presentar una versión sesgada o incompleta de la realidad.Al contar una historia, omite los detalles clave que hacen que el manipulador no parezca el culpable y solo presentar los datos que lo favorecen.
6. Adulación excesiva: Usar elogios exagerados o halagos para manipular emocionalmente a alguien y ganarse su favor, haciendo que baje la guardia. Alhacer cumplidos continuos a alguien hace que este se sienta en deuda emocional y más dispuesto a hacer lo que el manipulador desea.
7. Aplazamiento o evasión (Dilación estratégica): El manipulador retrasa la toma de decisiones o evita el conflicto con evasivas, para que la otra parte se sienta frustrada o obligada a ceder.Se trata de ignorar o postergar una respuesta importante hasta que la otra persona pierda interés o ceda debido a la presión del tiempo.
8. Polarización: Presentar una situación como un dilema extremo, donde solo existen dos opciones posibles, generalmente muy polarizadas. El manipulador busca que la otra persona piense que no hay más alternativas.Decir «o estás conmigo o estás contra mí», eliminando cualquier posibilidad de un punto de vista intermedio.
9. Técnica del pie en la puerta inversa (Ganancia excesiva): Hacer una petición extrema o poco razonable primero, para luego «ceder» y pedir algo más moderado, que era el objetivo real. La persona manipulada sentirá que el manipulador fue razonable al reducir su demanda.Por ejemplo pedir un favor enorme, esperando un no, y luego pedir algo más pequeño, que parece más razonable en comparación.
10. Ataque personal o desacreditación (Ad hominem): En lugar de refutar los argumentos de la otra persona, el manipulador ataca su carácter, credibilidad o emociones. Esta táctica busca desviar la atención del tema central y poner a la otra persona a la defensiva Por ejemplo en una discusión, en vez de debatir un punto específico, decir cosas como «Eres demasiado intensa para pensar claramente».
11. Silencio o ignorar (Ley del hielo): Usar el silencio o ignorar a alguien como forma de castigo o manipulación, haciendo que la persona busque complacer al manipulador para restablecer la comunicación. No responder a llamadas o mensajes, o dejar de hablar durante un conflicto para que la otra persona sienta la necesidad de ceder.
12. Chantaje emocional: Generar en la otra persona sentimientos de culpa para que actúe en favor del manipulador. El manipulador se presenta como alguien que sufre o necesita ayuda, aunque sea en exceso.frases del tipo «Después de todo lo que he hecho por ti, ¿cómo puedes negarte a ayudarme?».Otras veces el manipulador usa amenazas emocionales directas o encubiertas para conseguir lo que quiere. Puede amenazar con retirar su afecto, romper una relación o causar daño emocional si no se cumple su demanda. Por ejemplo decir «Si no haces esto por mí, no sé si puedo seguir en esta relación».
Estas tácticas son diseñadas para manipular a los demás y no respetan la autonomía ni el bienestar emocional de las personas. Reconocer estas estrategias es clave para protegerse de la manipulación y fomentar relaciones más saludables basadas en la honestidad y el respeto.